Self.
Suspiro y comienzo a desatarme poco a poco de mi cuerpo, de la vida, de los recuerdos, las vivencias, las manos, los errores… Suavemente me desligo de lo que fui, de lo que fuimos, de lo que hicimos; poco a poco lo voy dejando, voy abandonando, saliendo, olvidando…
En esta ciudad que me vio nacer, que me cobijó durante muchos años, diecisiete aproximadamente, ciudad en la que reí, lloré, ciudad que me acunó en noches de insomnio y de penurias. Ciudad en la que extraños se me hicieron amigos, lugar donde de la mano de un santiaguino errante me fui desvaneciendo hasta hacerme mísera espuma burbujeante… Ese fue uno de mis más graves errores.
Me sumé más tarde a otro asunto, un jardín de cuarenta bellas amapolas cada una con sus defectos y virtudes, una unida a la otra, todas juntas una gran maraña de compromiso y lealtad; éramos cuarenta mujeres en una sola gran fémina… Cariños que nacen, cariños que vuelven, cariños que fueron y que se van…
Comienzo un nuevo ciclo, rompo el hielo y lo bebo poco a poco, lentamente, sin apurarse, evitando salpicar. Emociones encontradas, colapso interior, sonrisas de colores, abrazos de bienvenida; un éxtasis de buena energía y yo con un terremoto tan íntimo como colectivo…
Estoy disfrutando, me voy deshaciendo y desatando mis amarras, los veo a todos y todos son tan míos, tan mías… Mis nervaduras ya no tienen relieves, todo está bien, todo esta perfecto, todos estamos en todo y todo es lo mismo para todos… Los detalles, los momentos, las circunstancias, son las que nos desenfocan y eso resulta ser el temible y fugaz paso a la otra dimensión; pero calma, respira profundo, siente tus latidos y procura encontrarte a ti misma… Sonríele a la gente, saluda con delicadeza, se tan dulce como lo eres… Todo está muy bien y vamos caminando juntos asidos de las manos, manos que son tan débiles, pieles que son tan distintas unas de otras, músculos que casi no aprietan, huesos que casi no articulan… Conexiones intramundanas, encuentra en cada ser la esencia, esa esencia de la que tanto hablas; aquella mezcla de substancias que te harán sonreír a la luz del sol entre los pastos.
.:Sacúdete los nervios, somos todos humanos, humanos con sabores a los que debes estar dispuesta a degustar:.

